Un silencio que apenas susurra
inaudible para muchos
estruendoso para pocos.
Un silencio que acompaña soledades,
secretea en el corazón y navega hasta el alma.
Un silencio que hace escándalos sonoros,
que llegan a los tímpanos de la memoria.
Un silencio nunca es silencio mientras
haya alguien capaz de sentirlo,
de verlo, de sufrirlo, de tocarlo.
Un silencio nunca es silencio.
Un silencio nunca está callado